Durante la última década la utilización de aluminio en la industria automovilística ha aumentado de forma constante ya que absorbe más de la cuarta parte del aluminio que se produce. Actualmente  se fabrican de aluminio piezas como pistones, carcasas de motores, ruedas, cajas de transmisión, sistemas de frenos anti-bloqueo, conjunto de suspensión, amortiguadores e intercambiadores de calor para los sistemas de climatización, radiadores, estructuras y carrocerías entre otros.

El uso de este material con lleva grandes ventajas medioambientales: la ligereza del material supone una reducción del peso del vehículo de hasta un 30% lo que se traduce en un ahorro de combustible. En términos de reciclabilidad  más del 95% del aluminio contenido en los automóviles es recuperado y reciclado.

Otro medio de transporte muy utilizado en el mundo es la bicicleta, cuyo armazón también está fabricado a partir de aluminio. Este es el material por excelencia en la industria del ciclismo, y es difícil que sea desbancado, sus ventajas son muchas con respecto a su predecesor, el acero, hoy reservado solamente para bicicletas de baja gama.

En esta industria se utilizan aleaciones de aluminio con escandio, lo que permite obtener en el aluminio ciertas microestructuras que resultan en mejores propiedades de resistencia, es decir, permite hacer paredes más finas y por lo tanto tubos más ligeros sin comprometer la resistencia mecánica del material. Otra propiedad interesante es la resistencia a la corrosión, lo cual de da durabilidad al material en cuestión.

Numerosos productos relacionados con la construcción son utilizados y reutilizados (reciclados) diariamente en las construcciones comerciales e industriales. Las características del aluminio que le otorgan su valor e importancia son principalmente su bajo peso, durabilidad, maleabilidad, versatilidad, capacidad de deformación, resistencia a la corrosión y la estética.

Entre los productos más destacados se encuentran soportes, aberturas, zócalos, revestimientos, ventanas, techos, otras aberturas, aislamientos térmicos, puertas y productos de ferretería como picaportes, tornillos, clavos, remaches, herramientas, entre otros. Se suele utilizar aluminio puro o aleado con manganeso y silicio, aumentando la resistencia y la dureza del mismo.

El aluminio es como un almacén de energía (15 kWh/Kg), por ello tiene un gran valor que no puede desperdiciarse y su reciclado se traduce en recuperación de energía. Las propiedades que hacen del aluminio un metal tan provechoso son: su ligereza (sobre un tercio del peso del cobre y el acero), resistencia a la corrosión (característica muy útil para aquellos productos que requieren de protección y conservación), resistencia, es un buen conductor de electricidad y calor, no es magnético, no es tóxico y es muy dúctil.

Solamente presenta un 63 % de la conductividad eléctrica del cobre para alambres de un tamaño dado, pero pesa menos de la mitad. Un alambre de aluminio de conductividad comparable a un alambre de cobre es más grueso, pero sigue siendo más ligero que el de cobre. El peso tiene mucha importancia en la transmisión de electricidad de alto voltaje a larga distancia y actualmente se usan conductores de aluminio para transmitir electricidad a 700.000 voltios o más. Por otra parte el aluminio también está presente en las antenas para televisores y satélites.

Muchas de las propiedades del papel aluminio se combinan para proporcionar un excelente empacado de medicamentos, creando así una barrera contra los rayos de luz, humedad, oxígeno, gases y otros líquidos. Es resistente y puede ser laminado con otros materiales para la aplicación que solicite. El peso ligero permite un alto rendimiento y disminución de costos, todos nuestros productos son certificados por la NSF.

Los laminados vienen en una condición completamente estéril debido a la temperatura de recocido y procesos finales de acondicionado. No es peligroso para la salud y ofrecemos laminación con o sin impresión y el embalaje necesario para asegurar los estándares médicos de esterilidad.

El uso de la lámina de aluminio en la confitería es cada vez mayor. Además de proteger el producto del medio ambiente, le da el toque decorativo.

Muchos productos de chocolate son almacenados por largos periodos de tiempo y finalmente la superficie con su atractivo brillo suelen deteriorarse al ser expuestos a la humedad y a la luz. El papel aluminio o laminado ofrece la mejor protección, proporcionando una barrera total a la luz, la humedad y a la penetración de aroma y sabor. Además, puede ser doblado firmemente a la superficie del chocolate.

Para cualquier producto de confitería, la superficie metálica brillante de la lámina de aluminio también aporta color e impacto, añadiendo diversión y el disfrute del producto.

El aluminio representa una alternativa más ligera y de menor costo gracias a una de sus importantes propiedades: conduce el calor perfectamente. Los intercambiadores de calor de aluminio tienen un conjunto único de características que lo hacen ideal. Es por eso que las capas de papel de aluminio en el interior de un intercambiador de calor se han vuelto tan importante en la producción de sistemas de calefacción, ventilación, aire acondicionado (HVAC) y (R) aparatos de refrigeración.

La tendencia es clara, los clientes industriales de la calefacción, ventilación, aire acondicionado y la refrigeración del mercado, están usando aluminio en sus aplicaciones de transferencia. El resultado final es un mejor rendimiento en términos ambientales y de rentabilidad.

En este campo encontramos el uso del aluminio principalmente en la fabricación de microchips (si bien la base de éstos está hecha de silicio). Tienen numerosas aplicaciones, como en la fabricación de sensores (térmicos, de movimiento, eléctricos, entre otros), amplificadores, baterías, memorias y productos inalámbricos, robótica y automatización de procesos. La principal característica que avala este uso es su alta conductividad eléctrica. Hoy en día existe la tendencia mundial de darle un nuevo uso al aluminio por su versatilidad con propiedades atractivas, no tóxico, no inflamable, no magnético, no produce chispas y no se oxida.

El aluminio y la electrónica encajan en los discos compactos, frentes de estructuras y los disipadores térmicos de computadoras, impresoras, televisores, videos y equipos electrónicos. Las funciones incorporadas en los perfiles de aluminio reducen la cantidad de componentes y simplifican el ensamblaje, junto con un acabado atractivo y una óptima conductividad térmica.

El aluminio está presente en casi todos los productos que consumimos. Cada vez que alguien consume un vegetal, una fruta o un producto animal, está consumiendo pequeñas cantidades de aluminio, aunque la gran mayoría es eliminado por las funciones propias de nuestro organismo. Además, existen aditivos a base de aluminio en la preparación de muchos platos de comida, como en la producción del queso.

Otra propiedad que hace muy útil al aluminio es la formación de una capa de óxido de aluminio en su superficie (en presencia del aire), que ayuda a almacenar distintos tipos de comida. Asimismo, los envases de aluminio son fuertes, livianos y compactos, no se corroen, mantienen aromas, gustos y gasificación.

El foil de aluminio posee características ideales para sus usos. Se utiliza mayormente para envasar comidas y productos farmacéuticos. Es completamente impermeable, es liviano y resistente, flexible y dúctil. Como todos los productos de aluminio, es de larga durabilidad. Es aislante, no es tóxico, es de fácil esterilización. Es un excelente conductor térmico, tanto como para productos calientes como para congelados.

Los elementos de cocina están en su mayoría hechos a base de aluminio. Su durabilidad es una propiedad muy importante ya que no es necesario renovarlos constantemente. Además, no impregna olores a la comida, es resistente y tiene excelente capacidad para conducir el calor.

Más del 50 % de los elementos de cocina producidos cada año está hecho a base de aluminio. Desde su descubrimiento que fue ampliamente aceptado por el público y por los profesionales de la materia.

Este material también favorece el ahorro del calor empleado en la cocina al desperdiciar solamente el 7 % del calor que recibe, es decir, que el 93 % del calor que se emplea para cocinar se transmite a la comida que se prepara.

No hace mucho tiempo, los autos eran de color rojo, los televisores negros y los lavarropas y heladeras blancos. Ahora, todo tiende a ser más elegante, brillante y de aluminio.

Equipamiento para oficina, accesorios, muebles, iluminación, el marco de la pizarra en la sala de conferencias, los soportes de sujeción para cuadros, los marcos y patas de las mesas, los bastidores y pantallas de iluminación son ejemplos de componentes fabricados a partir de de aluminio. La resistencia, el bajo peso, la facilidad de conformado y el acabado superficial atractivo son las características más importantes para elegir el aluminio.

Ingenieros, diseñadores y arquitectos eligen el aluminio en sus construcciones y proyectos por su maleabilidad, por su ligereza, o incluso por su aspecto decorativo. Dondequiera que miremos el aluminio se encuentra presente desde  la cocina de nuestras casas hasta en la oficina.

En este sector, las aplicaciones son múltiples y abarcan desde la fabricación de latas, el papel de envolver, la capa intermedia de envases de cartón (tetra brick) hasta láminas para cerrar yogures, foil tabaco, confitería, foil institucional, medicamentos, etc.

El aluminio es ampliamente considerado como el material de envasado más versátil del mercado debido a su química inerte y a su estabilidad metalúrgica. El aluminio es un material excelente para el envase y el embalaje. Es ligero e impermeable, con excelentes propiedades que protegen los productos de la luz, la humedad, el oxígeno y los microorganismos que pueden alterar la conservación. No es tóxico ni tiene sabor y en muchos casos, no tiene rival como material de envase para alimentos y productos farmacéuticos.

Una combinación única de características físicas que hacen del papel de aluminio un material esencial para el uso en el hogar y restaurantes, entre otros. El papel de aluminio proporciona una barrera total a la luz, el olor y la humedad, por lo que es ideal para la protección de los alimentos sensibles durante la cocción y el almacenamiento.

Sus propiedades mecánicas lo hacen confortable y fuerte.